Marsala

Tiene una historia increíble y antigua, como la atracción que sentían los grandes y talentosos comerciantes ingleses por estas tierras.
Este famoso vino, un fino destilado para saborearlo lentamente para captar todos sus matices, es un perfecto vino de meditación, cuyo sabor y aroma recuerdan a las avellanas y a los frutos secos, debido al oxígeno que ha moldeado su aroma.
Es tan importante que en 1969 Marsala fue el primer producto italiano reconocido como DOC.
Los tipos de Marsala son tantos como los diferentes métodos para su procesamiento, las vides utilizadas y el contenido de azúcar. El dorado y ámbar Marsala proviene de las variedades de uva blanca siciliana, mientras que el Marsala Rubino se prepara con uvas Pignatello, Nero d’Avola, Nerello Mascalese.
Las variedades Marsala Fine, Superiore y Superiore Riserva tienen una crianza de uno, dos y cuatro años respectivamente y requieren que el Marsala esté curada, es decir que se le agregue mosto cocido, sifón y alcohol (o brandy).